20/02/11

• El Taki Onccoy


LA REBELIÓN DE LAS “HUACAS”
Por: Carlos Mejía Gamboa

Danzantes de Tijeras (Foto: Promperú)

La memoria de la cultura andina mantiene intacta una serie de hechos trascendentales que pueden permitir la reconstrucción de una historia negada, borrada, tergiversada e incluso omitida. Los investigadores, en su mayoría, han dedicado sus esfuerzos a la reconstrucción hipotética, al carecer de elementos concretos de información; tal vez, con una predisposición subjetiva de superioridad cultural los han calificado de mitos, leyendas, creencias, etc., por no llegar a comprender la profundidad con que fueron establecidos y, muchas veces, conservados. El desconocimiento de la cosmogonía indoamericana sumado al escaso conocimiento de los idiomas de los propios de esas culturas ha hecho caer, en muchísimas ocasiones, en elucubraciones que tienen trasfondo comparativo premeditado. Desde los cronistas, los conceptos de organización administrativa, social y económica utilizados, partieron de parámetros ya establecidos en Europa, y lógico que no pudo ser de otro modo, puesto que con lo que se estaban topando era con un mundo abismalmente distinto. Y los cambios que impusieron los conquistadores no consideraban lo existente, "llegaban con una verdad absoluta", debían reemplazar con todo lo que tropezaran, aunque más de una vez quedaran asombrados de la organización de esos pueblos. Hernando Cortés lo vivió en carne propia.

Hay hechos que no se pueden soslayar como consecuencia de la arremetida conquistadora. Así, por ejemplo, el denominado Mesianismo andino, surgido en el siglo XVI, se dice que fue construido a la imagen del Inca. Los mestizos y criollos se aferraron a él en forma muy disímil porque significaba la explicación de su estirpe o la legitimación de derechos, mientras que para la población esa imagen representaba a un Jefe Supremo, un redentor. El orgullo de un imperio rico y no alejado del amor a la Tierra alimentó en la población, por mucho tiempo, la esperanza de la reimplantación de un sistema que les pertenecía; esa espera pretendió ser atenuada en la lucha permanente contra el tiempo y las dificultades impuestas por los conquistadores. Sentidos en un principio el avasallamiento, la humillación, el ultraje, la evidente postergación, los nativos se preocuparon por el lugar que ocuparían sus dioses y los contrapusieron enfrentados a los nuevos, carentes de todo significado teológico, razón por la que pudieron considerarlos a los propios más fuertes y poderosos. La iglesia satanizó a todos los dioses andinos.

La Danza de las Tijeras, proveniente del departramento de Ayacucho (Perú), es una fuente indiscutible para comprender esta polarización divina. Los danzantes estaban comprometidos con los Dioses Montaña y la Madre Tierra, de quienes recibían su fuerza. A eso los foráneos le denominaron tener un pacto con el diablo, y por ello prohibieron la danza y la reprimieron; sin embargo, se conservó en la clandestinidad. Ahora podemos sentirnos orgullosos de su existencia y nos deleitamos con su complejidad, con la rareza de su musicalidad, pero sobre todo por su significado, ya que encierra la memoria de un pueblo antiguo.

La rebelión de las "huacas", como lo llamaban a los dioses andinos, contra los dioses españoles es lo que denominan Taki Onccoy, que se constituyó en un movimiento de libertad y salvación, allá por los años 1550, cuya característica fundamental no pretendía un enfrentamiento directo, un ataque frontal mediante la guerra contra los conquistadores, sino un replanteamiento moral y una resistencia pasiva frente a la dominación. Se convirtió en una respuesta ideológica que tomaba elementos ofrecidos por el proceso de aculturación, el de la evangelización. Los dioses se encarnaron en la población indígena, conduciéndolos a "estados de posesión que los hacía temblar, caerse y bailar como locos", el significado de Taki Onccoy nos lo dice : enfermedad del baile.

El movimiento prometía a sus seguidores un mundo sin desequilibrios a partir de la purificación espiritual de los poseidos que renunciaban al cristianismo y se afianzaban en los dioses autóctonos resurgidos con más poder. Si bien es cierto que tenía una connotación espiritualista, fomentó el fortalecimiento de actitudes y relaciones que mejorarían las posibilidades de una rebelión india que lograría éxitos inesperados. Consiguió estrechar los vínculos parenterales y mejoró la relación entre comunidades rivales.

Unificados en torno a un objetivo, se hizo que la cultura andina, se sumergiera en un mutismo justo y necesario. Como consecuencia de la represión permanente por parte de la corona imperial europea, aprendieron a guardar con mucha entereza y autenticidad una cultura profundamente elevada, hasta nuestros días.

19/02/11

• El legendario libro de los Quiché


MEMORIA INNEGABLE DE UN CONTINENTE
Por: Carlos Mejía Gamboa

Imaginar a las culturas indoamericanas desde una óptica de la civilización occidental –para los americanos debe ser oriental–- es hacer de ellos pueblos salvajes, ajenos a todo proceso de desarrollo humano, y catalogarlos, si se quiere, como grupos humanos atrasados. El desconocimiento de esas realidades, permite este tipo de apreciaciones que para muchos resultan aberrantes; para otros, como es nuestro caso, son expresiones indudables de la forma cómo se ha conservado esa ignorancia del mundo que les rodea.

Al tiempo del polémico descubrimiento de un nuevo continente, desde hace un poco más de quinientos años llamado "América", los pueblos allí arraigados no se encontraban en atraso a pesar de estar aislados del resto del mundo. Eso se puede comprobar fácilmente con la observación de la arquitectura, las redes de caminos, la organización política y social, además de los logros en el plano intelectual. De modo palpable lo demuestran los Inkas en Perú, los Aztecas en Méjico, los Mayas en Yucatán y Guatemala, entre otros. En este sentido, es fácil comprender que el proceso de conquista de esos territorios ejerció un poder destructivo sin límites, los pueblos o grupos de pueblos fueron esclavizados y ciudades como Tenochtitlán, Utatlán, Cuzco, fueron arrasadas, saqueadas, incendiadas; sus mejores hombres acribillados, su nobleza eliminada, sus templos humillados, sus archivos desaparecidos...

En ese contexto de barbarie, los misioneros cumplieron una labor fundamental de destrucción del orden espiritual vigente para reemplazarlo por el de la evangelización, fin al que sirvieron titánicamente. Pero en ese orden, ellos también redujeron a cenizas todo aquello que representara permanencia de las antiguas creencias, aunque con algunas excepciones se mostraron inclinados a conocer las tradiciones, las expresiones artísticas, las costumbres, los usos, de aquellos pueblos vencidos. Entre ellos destacan Torquemada, Las Casas, Sahagún. En sus obras hay muestras de poesía, oraciones, invocaciones, de los anturales; pero, el verdadero pensamiento manifestado en canciones, leyendas, cuentos, han sido recogidos no hace mucho tiempo atrás, extraídos de todo lo que hasta ahora se conserva en los países americanos. Por otro lado, no es de olvidar que las culturas mesoamericanas, por mencionar un sector importante, poseían escrituras que les servía para determinar su comercio, su calendario, sus ciclos agrícolas, su geografía y su historia, prueba de ello es que en algunas bibliotecas europeas se encuentran originales de auténticos libros impregnados de escritura jeroglífica que inclusive ha sido descifrada. Con el aprendizaje del castellano, muchos indígenas pudieron transmitir con mayor facilidad datos que sólo ellos conocían y que, sin duda, se remontaban a tiempos inmemoriales.

HALLAZGO DEL POPOL VUH
En la actualidad, no cabe la menor duda de que el Popol Vuh, "es el libro indígena más importante de América" o, como lo dice Hubert Howe Bancroft, "...una de las más raras reliquias del pensamiento aborigen". Es un libro religioso e histórico: se le puede comparar con la Biblia. Rebaza su carácter arcaico puesto que sus leyendas se repiten en la actualidad en el mundo maya, reafirmando un mundo espiritual acorde al mundo material construido hace muchas centurias. Se considera que las historias que la conforman fueron transmitidas de forma oral de generación en generación, hasta que fue escrita en años siguientes a la Conquista, en lengua quiché pero utilizando la grafía del castellano, y quien lo habría recibido de primera mano fue el cura Francisco Ximénez, dominico llegado a Guatemala en 1688 a desempeñar el sacerdocio en Santo Tomás de Chuilá, ahora de Chichicastenango. Con avidez indudable, este cura habría leído ese libro, ya que conocía el idioma quiché, y lo tradujo pacientemente al castellano; el texto original quiché desapareció. El cura Ximénez escribió, también, otros libros relacionados a los pueblos Cacchiquel, Quiché y Tzutuhuil, en los que hizo un estudio comparativo de sus idiomas; esto permite no dudar de que la traducción que hiciera el citado dominico es casi exacta. Por la confrontación de fechas y personajes contenidos en el manuscrito de Ximénez, algunos autores deducen que el Popol Vuh fue escrito en quiché(con grafía del castellano) por el año 1544.

TRADUCCIONES DEL POPOL VUH
Como es lógico pensar, estos trabajos habrían quedado refundidos en espera de su publicación y quedaron postergados en el olvido después de la muerte del cura Ximénez. Hubieron de transcurrir muchos años hasta que en 1854, el Dr. Carl Scherzer, austriaco, los tradujo y los publicó, en Viena en 1857, como “Las Historias del origen de los indios de esta provincia de Guatemala”. Un año más tarde, Charles Étienne Brasseur de Bourbourg, tiene acceso al manuscrito de Ximénez, lo traduce al francés y lo publica como “PopolVuh. Livre Sacré et les mythesde l'antiquité américaine”. Esta publicación tuvo mucha acogida, pero  sirvió para difundir la existencia de tan maravilloso texto, y estimuló a los círculos científicos hacia el tema. De esta edición francesa fue traducida al alemán, en 1913, por Noah Elieser Pohorilles y publicada en Leipzig; otra versión alemana la hizo el Dr. Leonhard Schultze-Jena, como profesor de la Universidad de Marburg, y la publicó en Stuttgart en 1944 como “Popol Vuh. Das heilige Buch der Quiché Indianer”. Algunos estudiosos reconocen que esta última versión es más fidedigna que la francesa porque el Dr. Schultze-Jena tuvo a la vista una copia fotográfica del manuscrito de Ximénez.

En 1925, Georges Raynaud, también publicó una versión francesa del Popol Vuh. Al castellano fue traducido por J. Antonio Villacorta y publicada en Guatemala en 1927 con el nombre de “Manuscrito de Chichicastenango. El Popol Buj”. La edición más exacta se dice que corresponde a Adrián Recinos y apareció en Méjico en 1947. De esta edición se hizo la traducción al inglés, en 1950, y fue editada por la Universidad de Oklahoma (USA) bajo el título “Popol Vuh. The Sacred Book of the Ancient Quiché Maya”.

Posteriormente se hicieron traducciones a otros idiomas, logrando su universalidad.

CONTENIDO DEL POPOL VUH
Las versiones difieren de unas a otras, en el ordenamiento de las historias relatadas; así, por ejemplo, Emilio Abreu Gómez, lo hace en dos partes: Los Abuelos y Los Magos. Adrián Recinos lo divide en tres partes y por ser un autor referencial para los demás, vamos a dejar a él la descripción del contenido del Popol Vuh. Dice: "La primera (parte) es una descripción de la creación y del origen del hombre, que después de varios ensayos infructuosos fue hecho de maíz, el grano que constituye la base de la alimentación de los naturales de México y centroamérica. En la segunda parte se refieren las aventuras de los jóvenes semidioses Hunahpú e Ixbalanqué y de sus padres sacrificados por los genios del mal en su reino sombrío de Xilbalbay; y en el curso de varios episodios llenos de interés se obtiene una lección moral, el castigo de los malvados y la humillación de los soberbios. Rasgos ingeniosos adornan el drama mitológico que en el campo de la investigación y expresión artística no tiene rival en la América precolombina. La tercera parte no representa el atractivo literario de la segunda, pero encierra un caudal de noticias relativas al origen de los pueblos indígenas de Guatemala, sus emigraciones, su distribución en el territorio, sus guerras y el predominio del araza quiché hasta poco antes de la conquista española. En esta parte se describe también la serie de los reyes que gobernaban el territorio, sus conquistas y la destrucción de los pueblos pequeños que no se sometieron voluntariamente al dominio de los quiché".

UN FELIZ ENCUENTRO (Anécdota personal)
Entre las cosas que suelen sucederle a uno, hay algunas que merecen no dejarlas de lado o refundirlas en el desván de los agradables recuerdos. La aparente imposibilidad de explicarlas puede conllevarnos a profundizar sus significados, importantes unas veces y trascendentales otras. Hace poco, cuando por un impulso casi instintivo salí corriendo de casa para hurgar entre trastos viejos que se ofertan en algún lugar de esta ciudad (Berlín), no imaginé que me toparía con el libro indígena más importante de América: el Popol Vuh. Conocido también como Libro Sagrado, Libro del Consejo, y seguramente como Libro Nacional; se ha impuesto su denominación tomada de dos palabras del quiché, que puede considerarse como inamovible reivindicación a su inmemorial y legendario origen. Desde luego, ese hallazgo ha conmovido profundamente mi cosmovisión andina y ha fortalecido mi identificación natural con los grupos étnicos que perviven enclavados en la bastante castigada superficie latinoamericana, enriqueciéndola con la cosmogonía, mitología, relación de migraciones y crónica de sus protagonistas.

Allí está representada la grandeza de la espiritualidad maya y, aunque se ha pretendido crear controversias en base a la existencia de un código escritural, es posible que más de una de sus leyendas contenidas sean todavía transmitidas de manera oral; sin embargo, hay que reconocer que gracias a su conservación en la biblioteca de la iglesia de Santo Tomás de Chichicastenango, en Guatemala, ha podido llegar a enriquecer la sensibilidad religiosa, histórica, fabulosa, de cientos de estudiosos y millares de curiosos. No podemos dejar de imaginar a Pedro de Alvarado incendiando la ancestral Utatlán, persiguiendo y ahorcando a los nobles quichés, acosando a otros muchos en la toma de esa ciudad; mientras, el secreto de la creación de ese mundo, obra de Tepeu, Gutumaz y Hurakán era soterrado para la posteridad.

El texto que tenemos es una versión adaptada a la forma literaria contemporánea, que viene a ser el resultado de muchas revisiones, estructuraciones, con la finalidad de hacerla más comprensible y facilitar su difusión.

En estos tiempos en que Centroamérica ha llamado la atención en voz de sus pueblos indígenas, hemos comprendido que no se debe adoptar solamente una posición contemplativa y así como hay motivos para solidarizarnos por sus necesidades materiales, se nos abren senderos hacia el encuentro de un gran potencial espiritual que puede ayudarnosa vivir en armonía y que ellos nos brindan desde la distancia de los siglos. El Popol Vuh es instrumento que nos conduce a una concepción del mundo a partir de la creación, la vida y la supervivencia contraponiendo una especial sensibilidad a la frialdad moderna del alma.

(Chasqui-abril-1999)


13/02/11

• PROPUESTA DE MAURILIO MEJÍA MORENO - 1975


ORIGEN DEL NOMBRE DE AIJA 
Por: Maurilio Mejía Moreno

Aija - 1998
La palabra Aija viene de la voz griega Aix que significa “cabra”. También se refiere a un ave de la familia de las anátidas y del orden de las palmípedas. A esta voz se le ha agregado la desinencia “a” para dar origen a AIXA, palabra árabe usada como sustantivo propio para nombrar a las mujeres hermosas, alegres y discretas de Arabia, como la bella Aixa, hija de Abu Bécquer, que fue la tercera esposa de Mahoma, y que a la muerte del profeta gozó de gran influencia llamándosela “la Madre de los creyentes”. De allí que para los árabes Aixa es una de las cuatro mujeres incomparables que hayan existido en la Tierra.

Cuando los árabes, el 28 de abril de 711, al mando de Tarik, invadieron a España, dominándola durante ocho siglos, o sea hasta el año 1492, influyeron enormemente con su idioma en la formación del castellano. Por eso hay muchas palabras castellanas de origen árabe.

Ahora bien, al producirse la Conquista del Perú llegaron a Aija los primeros españoles aventureros trayendo este vocablo árabe-español y lo difundieron con el mismo significado nominando Aixa a las lindas doncellas aijinas de aquellos tiempos. Pues, de otro modo, es imposible encontrar esta palabra en nuestra lengua nativa, porque el pueblo dice también que no es Aixa sino Aiza; pero, en ambos casos, sin el significado quechua preciso ni siquiera aproximado. Aceptable es que Aixa sea voz árabe españolizada, puesto que los españoles la usaron también para nombrar a las bellas mujeres peninsulares, de acuerdo al idioma castellano de los siglos XV y XVI que estaba en su etapa de evolución formativa para convertirse en el idioma más rico, sonoro y fluído de España, como lo es en la actualidad. Por aquellos siglos del romance español la jota (j) fue poco usada y se le daba el sonido de “x” y no como ahora que tiene ya su fonación definida. Así, se decía Ximena (Jimena), dixo (dijo), dexo (dejo), dexado (dejado), caxón (cajón), caxa (caja), Mexía (Mejía), Caxamarca (Cajamarca), Xauxa (Jauja), Texas (Tejas), Truxillo (Trujillo), Caxatambo (Cajatambo), México (Méjico), etc.

COMENTARIO DE MAURILIO MEJÍA MORENO DE LAS OTRAS PROPUESTAS
Por otro lado el cura don José Antonio de Quijano, en 1760, al escribir sus relaciones menciona que al pie del camino de Rokna a Shiquin, hoy “Calle 28 de julio”, en Rarama o Tapac Rarama, hoy barrio de Rokna, don Santiago Cortez del Riojo, un caballero español, habíase hospedado “en la casa de una vieja largota tenida por hechicera y a la que acompañaba una linda joven, que no quiso decir cómo se llamaba y a la que don Santiago Cortez del Riojo acariciaba ycolmaba de regalos llamándola ¡Ah, hija!, ¡Ah hija!, que de tanto repetirse, según el cura Quijano, habría sido la causa de que se tomase como nombre propio del lugar por lo que se habría bautizado al pueblo español con el nombre de Aija”. Esta misma opinión la difundió el Dr. Santiago Antúnez de Mayolo Gomero, pero no convence por ser versión casi romántica y sentimental. Pues, don Santiago Cortez del Riojo, como todo español influenciado con lo árabe, idiomáticamente, la habría llamado Aixa a tal bella joven, sin recelos ni requiebres, y no ¡Ah, hija! que más es expresión cariñosa de una madre o de un padre que tiene compasión de su hija por alguna situación feliz o fatal que le toca afrontar. Mas no es la de un enamorado español que era imponente, terco, prepotente y abusivo. Sabido es que los españoles, durante la Conquista y Virreynato, sin respeto ni consideración alguna a nuestra raza, tomaban a las peruanas como cualquier hembra, sin manifestaciones líricas ni románticas, o sea sin amor ni enamoramiento. Por lo que se descarta totalmente esta opinión.

Además, el Dr. Santiago Antúnez de Mayolo Gomero, también basándose en las crónicas del cura José Quijano, afirma que, en el barrio de Shipshec, hoy Rokna, vivían hombres dedicados a la brujería, a la música, y que bailaban la danza típica del lugar, llamada “Aixa burr”. Cree que así se llamaba la danza porque los danzantes, de momento en momento, decían: “¡Ja! ¡Ja! ¡Aixa burr!, ¡Aixa burr!”, al chocar sus broqueles al sonido rítmico de la caja y “rayán” que sonaban así: “¡tui, tui, tan tan!, tui, tui tan, tan!”

Esta referencia tampoco es convincente, puesto que la palabra Aija no es autóctona, como ya hemos visto. Vino todavía con los conquistadores. Pues ellos al arribar a este lugar encontraron la danza “Huanca”, simplemente, cuyos danzantes portaban garrotes y máscaras, y usaban faldas largas, de color azul oscuro, y abiertas por un lado, por lo que los hispanos le antepusieron el vocablo “saya”, originando “Saya Huanca”, como se le llama hasta ahora. Esta danza la practicaban unos hombres largotes disfrazados de mujer, pareciéndose a hermosas mujeres, por lo que los peninsulares le dieron el nombre árabe de Aixa, o sea Aixas aijinas, y por la tropelía ovejuna o cabreriza con que danzaban, correteando en grupos de arriba hacia abajo y viceversa, le agregaron la voz onomatopéyica de “burr”, originando “Aixa burr”, que ahora ya no se practica en este lugar. No es aceptable el agregado “burr”, porque es raíz de la palabra vulgar burro.

Nota:
-        Fue leído por su autor, el 30 de agosto de 1975, en la Plaza de Armas de Aija.
-        “La Industria” de Trujillo lo publicó en febrero de 1976.
-        El Instituto Nacional de Cultura de Huarás lo incluyó en Cuadernos de Difusión N° 14, 1978.
-        “Nuevo Norte” lo publicó el 14 de marzo de 1999, en Trujillo.
-        La Revista Waru de julio-agosto de 2006, publicó este texto corregido y autorizado por su autor.

ACLARACIÓN NECESARIA A PROPÓSITO DE UNA CONFUSIÓN
Por: Carlos Mejía Gamboa

En muchos casos, cuando se tiene interés en conocer el origen de las palabras se recurre directamente a la Etimología y, gracias a ella, concluimos en un significado. Esta dará luz a nuestras inquietudes; pero, cuando los vocablos son difíciles de identificar se requiere de una acuciosa y metódica investigación. La labor del investigador se convierte, entonces, en una actividad que lleva tiempo y esfuerzo; además, esa tarea exige seriedad y honestidad. La seriedad impulsa a evitar elucubraciones subjetivas, faltas de coherencia, en el afán de despejar todo elemento que nos conduzca a cierto nivel de progreso. El hallazgo de ideas o conocimientos nuevos, será principio rector que ayude a fortalecer o rechazar teorías existentes que pretenden explicar algo.

El nombre de nuestra provincia Aija, también ha estimulado a que más de un estudioso pergeñe, en la leyenda o en los recursos académicos, para explicar su significado y origen. Al respecto hay explicaciones disímiles, entre las que destaca la propuesta de don Maurilio Mejía Moreno, por constituir una explicación académica seria, gracias a su formación profesional en el campo de la lengua castellana, su especialidad como reconocido docente.

Hemos incluido su teoria, en esta edición de Waru, debido a que por desgracia, en algunos otros medios como la Internet, le atribuyen equivocadamente dicha explicación a don Erick Santiago Antúnez de Mayolo Rinning. Comprendemos que será resultado de la falta de investigación seria y no por otra motivación. Nosotros reclamamos ante este tipo de confusiones, etc. Puede que algunos inclinados hacia el tema sólo lo hayan tomado de la Revista Sumac Coyllur, publicada al conmemorarse el 50° Aniversario de la Creación de la Provincia de Aija, en la que se incluyó un artículo de don Santiago Erick, titulado“Aija testimonio de vida”. En el mencionado artículo, el citado caballero, transcribe lo afirmado por Maurilio Mejía Moreno y obvia, desgraciada o mañosamente, incluirlo entre comillas como corresponde a toda cita, apareciendo como si la afirmación le perteneciera. ¡Hay que fijarse en la anterioridad de la propuesta! Estos casos son lamentables en los procesos de investigación porque hacen dudar de la calidad del investigador y reflejan una escasa seriedad. Es un ejemplo a no seguir, estimados lectores.

Ya no hay exclusividad de investigación en ninguna materia; por lo tanto, debe respetarse el esfuerzo de muchos otros estudiosos. (CMG)

(Aclaración adjuntada a la publicación del artículo que precede en la Revista Waru - 2006)

10/02/11

• La Nacionalidad

APUNTES PARA SU COMPRENSIÓN
Por: Carlos Mejía Gamboa

El hombre, como consecuencia de su esencia estrictamente social, ha ido creando según sus necesidades conceptos, fórmulas, situaciones, que permitieran identificar individualmente a los miembros del grupo o a éste en relación con otros. Así es como aparecen el nombre, el estado civil, la ciudadanía, la nacionalidad, etc.

El concepto que nos convoca, en esta ocasión, tiene sus orígenes en las relaciones sociales que luego fueron adoptadas por el Derecho y revestidas de juridicidad. La nacionalidad, emerge de un hecho natural vinculado al nacimiento mediante el cual se forma parte de una familia unida por consaguinidad (jus sanguini) y cuando estas familias se asientan en determinados territorios surge la comunidad de sangre complementada con el hecho de haber nacido en un mismo espacio geográfico (jus soli). Estas circunstancias han sido sustento de dos corrientes que nutrieron la naturaleza jurídica de esta condición legal y, en el proceso de teorización, se han enfrentado permanentemente. Sin embargo, como resultado de la época moderna se ha producido la preponderancia del jus domicili por considerar que lo más importante para una persona es el lugar donde ha establecido su hogar, donde habla y se comunica en idioma distinto al de su origen e inclusive desarrolla su personalidad; en otros términos, conduce a aceptar la indiscutible asimilación de una nueva identidad cultural.

En principio, toda persona que reúna ciertos requisitos objetivos y subjetivos pertenecerá a un grupo de mayor dimensión sociológica denominada nación; y, si esos requisitos conducen a crear un vínculo con el Estado se encontrará ante un fenómeno jurídicopolítico protegido por el Derecho Internacional: La Nacionalidad. El individuo que careciera de ella no contará con la protección de su Estado y será considerado apátrida. Siempre es el Derecho nacional el que determina qué personas físicas pertenecen a una nacionalidad, de allí que la encontremos consagrada en la mayoría de Constituciones de los Estados.

En el Derecho Internacional, el Congreso de Cambridge, de 1895, determinó los principios fundamentales sobre nacionalidad que fueron recogidos posteriormente por otros instrumentos legales nacionales y regionales, y ellos eran: Toda persona debe tener una nacionalidad; ninguna persona puede tener más de una nacionalidad; toda persona puede cambiar de nacionalidad; la renuncia pura y simple de la nacionalidad no basta para perderla; la nacionalidad de origen no debe transmitirse indefinidamente en el extranjero; la nacionalidad adquirida puede ser revocada; y, que toda persona puede recuperar la nacionalidad perdida. Éstos, han sido perfeccionados e incluidos en cuerpos legales como el Convenio de la Haya, de 1930, relativo a conflictos de leyes sobre nacionalidad o el conocido Código de Bustamante, Código de Derecho Internacional Privado.

Pero, el aspecto más importante de la nacionalidad es aquella que permite relacionar el derecho que tienen los nacionales de un Estado, que viven por alguna razón en otro Estado, a la protección ineludible de su propio Estado que, en materia jurídica, se conoce como la protección diplomática; la realización de ese derecho, desde luego, resulta bastante desigual por que no se plasma bajo el mismo criterio y dependen de si se tratan de Estados potencias o periféricos.

NACIONALIDAD Y CIUDADANIA
La gran mayoría de tratadistas europeos nos alcanzan una referencia conceptual entre estos dos términos al extremo de considerarlos sinónimos, de tal modo que su uso se hace indistinto; en el contexto americano sí existe la diferenciación de estos conceptos porque se entiende que la nacionalidad es un vínculo que permite a un hombre el goce de sus derechos políticos como sujeto de un Estado mientras que la ciudadanía otorga el ejercicio de los mismos. Esto quiere decir que no se podría equiparar la trascendencia conceptual de esas dos expresiones. Por ejemplo, hay muchos Estados que otorgan la condición de ciudadano a sus nacionales cuando recién cumplen 18 años, es el caso de Perú. A pesar de que puede resultar aparentemente sencillo, la definición siempre tiende a complicarse. Cabanellas, en su diccionario convertido en ineludible, nos dice que "los conceptos están sumamente mezclados; y ello se comprueba porque las formas de adquirir la ciudadanía suelen coincidir con los de la nacionalidad".

ADQUISICIÓN DE LA NACIONALIDAD
Se ha dicho que el Derecho interno de cada Estado es el que reconoce la nacionalidad de sus nacionales, pero cuando éstos son elementos de migración estarán supeditados a las leyes de migración y controles migratorios convertidos en asunto interno de otro Estado. En este sentido, el derecho de emigración reconocido no es asegurado por el Derecho Internacional, en cambio, la nacionalidad sí.

La adquisición está referida al logro efectivo y al reconocimiento del derecho a la nacionalidad que puede ser alcanzada en virtud de algunos medios conocidos, y son: Por nacimiento, medio principal y originario, en la práctica no contiene reglas uniformes; por naturalización, permite a un extranjero de nacimiento acceder a la nacionalidad del Estado cedente, encierra algunas variantes: matrimonio, legitimación, opción, adopción, residencia, trabajo y a petición del interesado; por recuperación, significa volver a retomar la originaria; y, por cesión territorial, la que se produciría de hecho.

PÉRDIDA DE LA NACIONALIDAD
La pérdida se produce por las siguientes causales: Por renuncia, que puede ser para adquirir otra; por desnaturalización, generalmente como sanción; por expatriación, aplicada como sanción política; por opción, la que se produce cuando una persona con dos o más nacionalidades elige una al cumplir la mayoría de edad; por naturalización, cuando el nacional recibe la nacionalidad de otro Estado; y, por sentencia judicial, como resultado de un previo proceso llevado ante el órgano jurisdiccional nacional correspondiente.

LA NATURALIZACIÓN
El derecho a un cambio de nacionalidad fue consagrado por el Instituto de Derecho Internacional (Cambrigde-1995), con validez hasta nuestros días; hay que entenderlo como "cambiar de nacionalidad", más no como "obtener una adicional". Lo demás está sujeto a la suma de intereses que predominen en esa aspiración. Podemos definir la naturalización como mecanismo mediante el cual se admite a una persona extranjera y se le concede la condición de nacional; si se pretende que conserve su nacionalidad de origen conserva, indiscutiblemente, su calidad de extranjero. Naturalizar produciría el efecto de asimilarlo totalmente equiparándolo sin ambages a los nacionales por nacimiento; de ese modo, estaríamos ante una nacionalización strictu sensu. Generalmente, la condición para llevarse a cabo la naturalización es la residencia.

LA DOBLE NACIONALIDAD
Este es un tema bastante polémico, por cuanto está lleno de apreciaciones subjetivas y abarrotada de apetencias políticas, expresión del manejo por parte de grupos que, de alguna manera, necesitan contar con el apoyo de la presencia extranjera en un país; eso ha sucedido permanentemente en los Estados Unidos en su relación con la población mexicana, por ejemplo.

La doble nacionalidad, como principio, transgredería otro que dispone el derecho al cambio de nacionalidad. Hay quienes sostienen que la doble nacionalidad no entraña una integración efectiva a un nuevo país - opinión que compartimos - porque determina una estigmatización permanente.

Para la comprensión de este tema es de importancia recordar la Ley Delbrück, expedida el 22 de julio de 1913 en Alemania; también, es conveniente resaltar el art. 278 del Tratado de Versalles que impelía a Alemania a reconocer la nacionalidad adquirida de sus súbditos. Para el contexto americano hay que tener en cuenta la Convención sobre la nacionalidad, desarrollada en Montevideo, en 1933, a la que siguen vinculados la gran mayoría de Estados - son 19 - que la suscribieron y cuyo objetivo principal fue evitar la doble nacionalidad; su art.1 es claro.

Consideramos que esa Convención es la directriz que ha definido la tendencia de las Constituciones latinoamericanas. Así encontramos establecido que la nacionalidad de origen se pierde por adquirir una nueva; pero, dependiendo de los tratados o convenios firmados entre Estados se permite la doble nacionalidad, como excepción; es el caso de algunos países de Centroamérica. Otros, establecen la automática recuperación de la nacionalidad de origen al ingresar al país.

El Derecho Comparado nos ofrece una gama amplia de posibilidades que exige un análisis profundo para sopesar las ventajas o desventajas que la doble nacionalidad acarrea. Deberán ser las misiones diplomáticas las que concientemente asuman responsabilidad en el esclarecimiento respecto de la naturaleza y trascendencia jurídica del fenómeno que acabamos de comentar.

6/02/11

• Entrevista a Susana Baca

LA VOZ DULCE DEL COMPROMISO
Por: Carlos Mejía Gamboa

Producción musical que permitió la entrevista

La presencia de Susana Baca posee algo especial que inunda el ambiente llenándolo de un calor humano excepcional, desbordante de serenidad, amor, franqueza. Su bien atesiturada voz, dulce y encantadora, encierra el misterio de su alma de mujer atemperada por la constancia, por el sacrificio que encierra su humana decisión de artista, por su esmero de pulcritud en el trato solidario y, quizás, por el perfecto modelaje de su ser. Se advierte que el tiempo la ha forjado de un modo grácil proclive a la tertulia, al uso dulce de la palabra amable, al regalo de instantes fraternos.

Y no es menos de esperar de esta reconocida artista peruana que ya lleva casi toda una vida entregando el sentimiento de su arte. Sus comienzos le recuerdan la época del colegio, la de la universidad; pero, no olvida aquellas representaciones dominicales en casa para complacer a los visitantes y familiares. En Susana Baca hay un expreso agradecimiento a su madre por apoyarla en su decisión de cantante, aún cuando ella misma supiera que “todos los músicos que ella había visto se habían muerto de hambre”; pero, esa anuencia materna la condicionó a estudiar Pedagogía. Es en esas circunstancias en que comprende la necesidad de tomar clases de canto y dedicarse definitivamente al arte de modo serio y consecuente.

Ofrecemos a nuestros lectores pasajes resaltantes de nuestra conversación para que por sí mismos puedan convencerse de las expresiones introductorias vertidas por nosotros.

IDENTIDAD CULTURAL Y COMPROMISO ARTÍSTICO
- ¿Hay un estímulo que ha definido tu decisión de dedicarte a la música?
SB: Todo está considerado como determinante e incluye algo más profundo todavía. Hay un momento en que me doy cuenta que nosotros los negros estamos negados en el Perú, no aparecemos por ningún lado. No hemos estado nunca en los libros de Historia. En el colegio las niñas de origen andino podían sentirse muy orgullosas de un pasado y nosotros los negros decíamos pero ¡cómo! Esa inquietud me lleva a recordar –porque yo ya estoy grande– cómo era mi infancia, cómo oía cantar a las tías, acompañarse con cajones de cubiertos y, cuando había una guitarra, cómo hacían voces y coros. Me lleva a recordar, también, cómo esas gentes tenían una manera de seguir el ritmo, una manera de cocinar, una manera de usar hierbas. ¡Una cultura interesante! Eso estimuló mi curiosidad. Primero me acerqué a mi madre, le pedí que me contara lo que sabía y nos quedábamos noches que se convertían en interminables. Posteriormente recorro el Perú. Ahora tengo una cantidad grande de material grabado.
– Hay una época que en Perú algunos estudiosos se preocupan por las manifestaciones afroperuanas. Un compromiso asumido por algunas familias, digamos los Santa Cruz, por ejemplo, permitió romper una postergación a la que estaban condenados los negros.
SB.- Claro. Al hacer eso sientes como que te liberas, ¡liberas memoria! He seguido el paso de otros investigadores, pero a mí me ha tocado la suerte de mostrar esa música al mundo, de mostrarla y ponerla en un nivel que no lo tenía antes.
– El camino que tú has decidido es difícil. Algunos lo han llamado “el camino tortuoso de la música”, ¿cuál es el secreto para lograr éxitos?
SB: Creer profundamente en lo que haces. Eso es y ha sido mi fuerza durante todo el tiempo en el que se me han cerrado muchas puertas. Son incontables esas ocasiones. En mi propio país sobre todo.
– Un colega en Perú decía que “Susana Baca es un símbolo de la música peruana pero más se le conoce fuera que aquí”.
SB: ¿Sabes qué me dicen? Me dicen: “¿cómo siente usted que tenga que venir un norteamericano a decir escuchen a esta mujer?” Para mí es muy grato pero también muy triste. A mí, en esta investigación que hicimos, –que la hago más por Perú que por investigadora, no es mi oficio– me sucedió algo interesante. Iba por la costa del Perú recogiendo material, grabando todo; de repente unos chicos de un grupo estaban tocando e imitando a un grupo de música chileno y al lado, casi a la vuelta de ellos, vivía el último tocador de calabaza del Perú. Un negro maravilloso, ¡un Señor! Él estaba tan cerca y no lo conocían, no lo habían buscado, no sabían su historia. Yo venía desde no sé dónde buscándolo casi a pie. Eso es decepcionante.

LA NUEVA CANCIÓN Y LA POESÍA
– Tengo una curiosidad. Decidiste dedicarte a cantar cuando estabas en la universidad. ¿Has topado con la Nueva Trova, la canción de protesta?
SB: Por supuesto, encontré en la llamada Nueva Canción y la poesía muchas de las palabras que yo quería decir o necesitaba decir. Entonces he usado mucho a los poetas y he hecho adaptaciones que permitan que la música afroperuana vaya ligada a la poesía.
– ¿No será por eso que en Perú la gente toma tu trabajo como elitista? ¿Percibes eso?
SB: Sí, lo he sentido y el tema ha sido tratado en algún lugar. Eso de que Susana canta para la elite. Creo que los que comentaron ésto no estuvieron cuando yo estrené, el 8 de marzo, “María Landó” y cuando fuí a cantarlo a los comedores populares tanto en Comas como en Villa El Salvador y en otras zonas periféricas de Lima. Las mujeres sentían que era su himno, lo bailaban y cantaban; además me preguntaban el por qué no podían verme en la televisión y por qué no había un disco grabado. Como te contaba, las dificultades de encontrar un sello discográfico hizo que mi marido un día creara su propio sello: creamos el circuito alternativo. Ahora encuentras un sinnúmero de jóvenes que trabajando duramente algunos meses al año,recibiendo préstamos de la familia, hacen su grabación, su disco. Después, cuando viene el hecho de que yo estoy en gira internacional y mis discos están en el mundo, entonces recién vienen las disqueras a decirme: “Señora, queremos grabarle...” Pero ya es un poco tarde.

FUJIMORISMO Y ESPERANZAS
– Claro. Porque siempre hay un proyecto personal, ¿no es cierto? Y, dime: ¿qué pasó los últimos diez años? ¿Estuviste en Perú?
SB: Sí, estuve en Perú.
– Esta última década ha sido una década en la que han estado comprometidos casi todos con el régimen, para sobrevivir. ¿Cómo ha sobrevivido Susana Baca a toda esa podredumbre?
SB.- ¡Ay! Hemos tenido que hacer maravillas, maravillas para poder remontar, para poder no dejar el alma, porque entendí que de todas maneras mi trabajo tenía que ser fuera y porque mi público era pequeño; yo no quería plegarme a la cosa comercial, a eso de que “lo negro está de moda”, ir a mover la cintura con falditas muy cortas. Nada de esa cosa podía ir conmigo.
– Y entonces ¿cómo sentiste el “baile del chino”?
SB: No me lo recuerdes, ha sido una cosa sin compás ni nada. En los primeros momentos en que sale Fujimori, tuve algo de esperanzas. No voté por él. Pero para su segundo período sí. Allí empezó todo. Durante su primer gobierno la gente no tenía el alma en el piso como al final de su período. Nos entusiasmamos tanto que en el segundo período lo apoyamos. Pensamos que luego disfrutaríamos. A la gente que se queda en el poder, conforme a esta experiencia, o que alguna vez tiene el poder, como que les da un virus, les da una enfermedad, no se quieren ir nunca, y además pierden la visión de la realidad. Por otro lado, como músico te preguntas: ¿qué está pasando? y te das cuenta que las cosas que te presentan en los medios no están bien, que hay una realidad distinta. Lo sientes a través del alma. Sabes que la gente está asustada, que tiene tristezas muy grandes. ¡Verse impotentes para solucionar sus problemas!
– ¿Podría decirse entonces que después de esa década te reafirmas en el concepto de que el arte es el medio que capta fácilmente el sentir de la sociedad?
SB: Claro, claro. La música, el arte, te pueden llevar a enriquecer el espíritu, a la reflexión, a mirar el mundo con claridad. Tienes que estar delante de todo, tú tienes que estar adelante para jalar a la gente. Para que la gente despierte.
– ¿No será ese concepto el que te ha servido para que te reafirmes en lo que estas haciendo?
SB: Sí. Podría decir que estoy satisfecha. Aunque a vece siento que estoy echando agua en la arena. No sé pero muchos artistas nos hemos preguntado: ¿de qué sirven nuestro canto, nuestro arte, nuestra obra de teatro, nuestros poemas? Lo único que me hace fuerte es que yo sé que la gente que asiste a un concierto mío, se lleva algo en el alma y les sirve de esperanza para sentir el amor, para sentir que no están solos.

SOBRE “ESPÍRITU VIVO”
– En tu última producción, ESPÍRITU VIVO, hay un verso que me ha llamado mucho la atención: “el fusil del poeta es la rosa”. ¿Es una elección adrede con la que quieres decir algo especial?
SB: Esa canción es un homenaje a Javier Heraud. A él lo conocí personalmente. Era alegre, lleno de vida y un día desapareció. Desapareció para todo el mundo, para sus amigos, sus familiares y, de pronto, nos enteramos de que muere acribillado en Madre de Dios. Eso nos planteó una serie de cosas a los artistas de esa época. Yo miraba mucho a los poetas, me agradaba conversar con ellos. Porque ellos significaban la rebeldía, estar en contra de lo establecido. Yo de alguna manera sentía eso y me plegaba a ellos, a César Calvo, a Antonio Cisneros... Los admiré y los sigo admirando hasta ahora. Pues, Javier Heraud fue también eso. Es algo de lo que te toca hacer en la vida. Tú eres el único que eliges y dices voy a continuar con mi música, con mi obra.
– ¿Cómo defines tu última producción?
SB: ESPÍRITU VIVO tiene ingredientes interesantes como el de haber juntado dos temperamentos que son muy diferentes. A dos músicos que hacen jazz y se emocionan con nuestra música. Les invitamos a participar desde el segundo disco que es “Eco de sombras”, pero esta vez queríamos estar juntos. Con Marc Ribot y John Medeski nos encontramos en Nueva York y tuvimos sesiones inagotables, para compenetrarnos y, de pronto, acontece lo del 11 de setiembre. Nosotros empezamos a grabar el 12. Fue terrible, nos conmocionó. Nosotros ya habíamos vivido algo parecido. Fue como retroceder a años anteriores en que salíamos de casa sin saber si regresaríamos, por eso entendemos exactamente lo que está pasando también en Israel, en Palestina, lo que pasó en los Balcanes; sin embargo, nos duele que se retribuya la intolerancia con más intolerancia. La clase dirigente de este mundo está mal.

En esos días cantamos y la música nos dio una fuerza muy grande para tomar conciencia de nosotros mismos. El poema “Si me quitaran totalmente todo”, de Alejandro Romualdo, yo lo elegí hace ocho meses atrás, lo grabamos el día 12 de setiembre. Sentimos como que ese poema se hubiera hecho en ese momento o en los momentos más difíciles del mundo. Ese poema que habla de perderlo todo pero que al final queda el amor y la esperanza.

3/02/11

• Ley peruana de Descentralización

Por: Carlos Mejía Gamboa

La Ley 27783 promulgada por el Congreso de la República de Perú, bajo la denominación de Ley de Bases de la Descentralización, es resultado de la superación de un sinnúmero de situaciones, naturales y adversas, que ralentaron, por momentos, el avance de su gestación. Como era de esperarse, el tema estimuló a discusiones con elevado nivel académico e intelectual que exigía la envergadura de la citada norma jurídica. Como todas aquellas reglas del orden positivo que trascienden a su mera aplicación, produjo casi un cataclismo político que, en definitiva, trazó la orientación real de su efectividad o fracaso, cuando se aplique a la realidad nacional peruana.
Su origen –mejor sería decir la necesidad de su creación– obedece en gran parte al objetivo que se ha planteado la clase gobernante de agilizar y hacer más efectiva la satisfacción de los intereses colectivos que es responsabilidad superior del Estado. De hecho, esa tarea no es nueva; se viene trabajando en ella ya hace casi más de una década en consonancia con lo que en determinado momento Moisés Naím había denominado “reformas de primera y segunda generación”. Perú lo había asimilado como reglas que exige el escenario internacional; de allí que, después de reducirse la inflación, cambiar en algo las reglas de la macroeconomía nacional, reducir el tamaño del gobierno, privatizar algunos sectores de la economía, tareas consideradas fáciles por Naím, quedaron por emprenderse las “reformas de segunda generación” para cuando se gozara ya de cierta estabilidad económica y posibilidades de un notorio crecimiento. Pero en Perú, un país con un escenario político convulso y complejo, las reformas de segunda generación, como: la mejora de la administración de justicia, reforma del Estado, descentralización, fortalecimiento de gobiernos locales, lucha contra la pobreza, entre otras, resultan complejos técnica y políticamente. A pesar de ello la suerte está echada.
CONCEPTUALIZACIÓN PREVIA
Al decir de Cabanellas, la descentralización no viene a ser sino la “acción de transferir a diversas corporaciones o personas parte de la autoridad o funciones antes ejercidas por el gobierno supremo del Estado”. Resulta que al mencionar al Estado pensamos inmediatamente en los tres pilares que lo conforman: el Poder Legislativo, el Poder Judicial y el Poder Ejecutivo, además de algunos otros organismos autónomos determinados por la Constitución Política, haciéndonos considerar que la envergadura de tal proceso sería de dimensiones extraordinarias. En realidad, está referida a la actividad que el Estado realiza a través del Poder Ejecutivo. De allí, se tendrá que comprender que consiste en la descentralización de la administración pública; es decir, en un mecanismo que materializa la reforma del Poder Ejecutivo, porque si se tratara de la descentralización política, ésta operaría en un Estado federal por cuanto implica independencia de poderes estatales respecto de los poderes federales(centrales).
Una característica de la descentralización administrativa es el hecho de que su creación corresponde al poder central. En el acto de descentralización administrativa no se otorga independencia sino que el poder central conserva determinadas facultades de vigilancia y control.
Es de resaltar las diferentes modalidades de descentralización. Ellas son: a) La descentralización por región. Es la que se adapta eficazmente a los conceptos democráticos porque permite conducir los intereses colectivos de la población en determinado espacio geográfico preestablecido, un ejemplo son los municipios. b) La descentralización por servicio. Permite otorgar independencia al servicio y conduce favorablemente a la formación de un patrimonio que se consolide como base a su ejercicio económico; tal vez, sería más preciso decir que esta modalidad crea organismos que prestan ciertos servicios públicos. c) La descentralización por colaboración. Posee particularidades que la difieren de las anteriores, puesto que por medio de ella se transfieren facultades de administrar a organismos privados que poseen solvencia técnica o capacidad para resolver determinados problemas.
Perú ha decidido asumir la primera modalidad de descentralización.
NORMA SUSTENTATORIA
La Constitución Política de 1993, en su Capítulo IV, De la Estructura del Estado, en su artículo 188, que menciona taxativamente la descentralización, lo define como “proceso permanente que tiene como objetivo el desarrollo integral del país”. De hecho, el contenido conceptual de ese proceso no avanza más allá de una simple caracterización, algo ambigua e incompleta como norma programática. Eso no ocurre con lo explícito que es el texto constitucional al referirse a la creación de regiones y cuando se ocupa del régimen municipal del país (arts. 189 al 199). En cambio, la Octava Disposición transitoria, de la citada Carta Magna, concede prioridad a la norma referida a la descentralización, incluso establece el año 1995 como plazo máximo para su aplicación. Como vemos, la realidad ha sido otra y sólo se ha mostrado incumplimiento y desidia gubernamental y congresal, manifiestos como consecuencia de una dictadura que feneció estrepitosamente.
El precedente de la regionalización, base estructural para la aplicación del proceso de descentralización, que se remonta al año 1989, resultó siendo un fracaso; por ello, en 1992, se instalaron los Consejos Transitorios de Administración Regional (CTAR) en tanto se definiera una estrategia descentralizadora coherente. Entonces se promulgó la Ley Marco de Descentralización que regulaba ese mecanismo, pero, todavía, en 1998. Mediante esta norma se creó un CTAR por departamento, toda vez que la demarcación regional anterior había quedado eliminada de forma expresa por la Constitución de 1993, que establecía la organización política departamental del país, mientras se llegaran a constitutir las regiones.
LA LEY 27783
Esta ley desarrolla con amplitud lo establecido por la Constitución Política respecto de la descentralización, regulando “la estructura y organización del Estado en forma democrática, descentralizada y desconcentrada” que corresponden al gobierno central, a los gobiernos regionales y a los gobiernos locales. De modo expreso norma la descentralización en materia administrativa, económica, productiva, financiera, tributaria y fiscal, estableciendo que regulará la conformación de las regiones y municipalidades, así como sus competencias, bienes y recursos, y relaciones de gobierno entre ellos. La finalidad que se propone es el desarrollo integral, armónico y sostenible del país, en beneficio de la población, acorde al concepto de descentralización anteriormente comentado.
El Capítulo II, de la misma norma, establece que para una efectiva aplicación del proceso de descentralización se requerirá que éste sea permanente, dinámica, irreversible, democrática, integral, subsidiaria y gradual. A estos principios se añaden otras referidas a la descentralización fiscal y para eso establece que las competencias serán claramente definidas, que predominarán la transparencia y predictibilidad, que existirá la neutralidad en la transferencia de los recursos y que se asumirá responsabilidad fiscal.
Mediante la Ley 27783, se determina que el territorio nacional se divide en regiones, departamentos, provincias, distritos y centros poblados, sobre las cuales el gobierno central preserva su jurisdicción. Aun cuando la concesión de autonomía de gobierno concedida se enmarca en las dimensiones política, administrativa y económica, se la considera un derecho y capacidad efectiva de gobierno, pero circunscrita a la labor de normar, regular y administrar asuntos públicos que determina la capacidad de gestión de los órganos descentralizados y siempre y cuando se asegure como principio supremo la unidad de la nación. De hecho, la autonomáa económica que consiste en crear, recaudar y administrar rentas e ingresos propios no pueden destinarse sino en consonancia con la Ley de Gestión Presupuestaria del Estado y conforme a las Leyes Anuales de Presupuesto, como garantía ante una posible colisión de necesidades e intereses a satisfacer con el gobierno nacional que continuará definiendo la estructura económica del país. Por ello las competencias delegadas y la autonomía concedidas por el gobierno nacional tendrán que enmarcarse siempre en el contexto de las normas constitucionales y leyes correspondientes; pero, en caso de colisión de normas será el Tribunal Constitucional quien lo resuelva.
¿CÓMO SE LLEVARÁ A CABO EL PROCESO DE DESCENTRALIZACIÓN?
La Ley 27783 establece que estará a cargo del Consejo Nacional de Descentralización(CND), cuya creación está prevista por esta misma norma, organismo independiente y descentralizado adscrito a la Presidencia del Consejo de Ministros. Estará conformado por un representante del Presidente de la República “que será el que lo presidirá, dos representantes de la presidencia del Consejo de Ministros, dos representantes del Ministerio de Economía y Finanzas, dos representantes de los gobiernos regionales, un representante de los gobiernos locales provinciales y un representante de los gobiernos locales distritales. El Presidente de este Consejo tiene el rango y goza de las prerrogativas de Ministro de Estado y, así como los demás miembros, debe ser designado por Resolución Suprema para ejercer el cargo durante 4 años. Se hace una aclaración necesaria respecto de los representantes del Poder Ejecutivo, en el sentido de que transitoriamente deberían ser elegidos por dos, tres y cuatro años, conforme al orden establecido en renglones anteriores.
LA CONFORMACIÓN DE LAS REGIONES
Cada región es considerada unidad territorial geoeconómica integrada en base a elementos históricos, económicos, administrativos, ambientales y culturales. Para su conformación se requiere de la fusión o integración de dos o más circunscripciones departamentales que colinden y que sea aprobada mediante referéndum por las correspondientes poblaciones, con resultado favorable de 50% más uno. Luego, las regiones son creadas por ley. Lima, Ciudad Capital, está exenta de ese procedimiento porque no integrará ninguna región por disposición de la propia ley, y estará sujeta a un régimen especial; del mismo modo ocurrirá con la Provincia Constitucional del Callao. Un detalle más de agregar es que la constitución de las regiones se hacen en base a cuencas y corredores económicos naturales, entre otras consideraciones.
COMPETENCIA DE LAS REGIONES
La determinación de competencias exclusivas están referidas a: planificar el desarrollo integral de la región, formular y aprobar un plan de desarrollo regional, aprobar su organización interna y determinar su presupuesto, promover y ejecutar inversiones públicas en la región, promover la efectiva formación de empresas y unidades económicas regionales, facilitar procesos orientados a los mercados internacionales en favor de sectores productivos importantes y de interés de las regiones, desarrollar circuitos turísticos, concretar acuerdos y alianzas con otras regiones, administrar los terrenos del Estado con excepción de aquellas que pertenecen a las municipalidades, promover la pequeña y mediana empresa.
Por otro lado, es de destacar que las competencias compartidas con el gobierno nacional están referidas al sector educación, salud pública, promoción y regulación de actividades productivas, gestión sostenible de recursos naturales, preservación y administración de recursos naturales, competitividad regional y promoción de empleo productivo, participación ciudadana.
PATRIMONIO DE LAS REGIONES
La Ley lo denomina Bienes y Rentas regionales, y entre ellas considera: muebles e inmuebles, asignaciones y transferencias que le corresponda según el presupuesto nacional aprobado, los tributos que recaudare, los fondos otorgados a su favor por el Fondo de Compensación Regional, los recursos asignados por concepto de canon, el producto de sus operaciones financieras, ingresos propios y otros establecidos por ley.
Teniendo en cuenta que los Gobiernos locales están determinados por las municipalidades provinciales y municipales, no hemos traído a colación lo que la ley dispone al respecto, ya que están reguladas por la Ley de Municipalidades y las normas establecidas en la Ley 27783 son repetidas o simplemente coincidentes.
RELACIONES ENTRE LOS GOBIERNOS REGIONALES, LOCALES Y EL GOBIERNO NACIONAL
Las relaciones entre estos estamentos se encuentran sustentados en base a relaciones de coordinación, cooperación y apoyo mutuo, de no interferencia, pero están obligados a proporcionar información que les requiera el gobierno central con la finalidad de actualizar y hacer efectivos los sistemas administrativos y financieros a nivel nacional. Los gobiernos regionales y locales mantienen relación directa con el Congreso de la República en materia legislativa a través de los canales ya establecidos.
En lo que corresponde a las relaciones con organismos internacionales, éstas se circunscriben a la cooperación técnica y financiera, y les está autorizado celebrar y suscribir convenios en materias conforme a su competencia y a las normas vigentes para el caso.

2/02/11

• Morada sin tiempo

¿DÓNDE ESTÁ LA POESÍA?

Versos robados al silencio,
palabras con sueños escritas,
hipérboles robadas al cariño,
delirios a la vida arrancados...
     ¿Dónde está la poesía?
Remansos bordados en tu pecho,
manantial de cristal tus ojos,
injuria sensual tus cabellos,
impulso incontrolable tus deseos...
     ¿Dónde está la poesía?
Encuentro de ignotos caminos,
arranque de secretos delirios,
abismo de un infértil destino,
regocijo de dolores perdidos...
     ¿Dónde está la poesía?
Alegría de días siderales,
tristeza de ímpetus fortuitos,
alevosía de amores cautivos,
infamia de pasos vacíos...
     ¿Dónde está la poesía?
En el brillo del último día,
en la locura paradójica del alma,
en el temblor rudo del pensamiento,
en el calor de furias maduras...
     ¡Está la poesía!
En el quebrado pudor del sino,
en la arruga cuajada del ayer,
en el curtido forcejeo de dioses,
en la agonía sutil del rocío...
     ¡Está la poesía!
Pero, porque insepultos gritos da
y no colinda con la verdad;
y, porque rehuye pérfida sin razón,
persisto, caprichoso, en preguntar:
     ¿Dónde está la poesía?


LOS RÍOS

Descienden reptando temerosos
y mueren ancianos en lontananza,
habiendo regado curtidos trigales
acaban, con ímpetus dormidos,
ahogados en un último beso salobre.
¡Oh, ríos!, llanto de dolidas alturas,
serpénticos dedos infinitos y de cristal,
incrustados en la superficie rugosa,
son fronteras de pequeños universos,
bosquejos de una Pachamama furiosa.
Descienden, se descuelgan... ¡no volverán!
Señores imperiales sin trono,
nómadas rebeldes e indolentes,
que de apacibles, con embrujo,
van saltando, resbalando, cayendo.
Cuando el sol les descubre,
royendo el vientre de la montaña,
dan gritos de luz, ráfagas de luz,
y en su dolor van temblando:
se derriten en amor, en querencia.
Sin embargo, se van... se van,
dibujando venas arcaicas... se van.


CÁNTARO

Greda, espíritu terraginoso,
sostén ominoso de creación,
¡de tí no se hizo al hombre,
sino de otro barro informe!

Arcilla, légamo,
te avienes con amor
y dócil te haces cuerpo,
a veces, también sudor;
tu alma tiene voz cóncava,
tu cuerpo a dioses invoca.
Frágil, peligrosa,
te ruborizas con ternura
cuando el fuego te devora
y dándote vida te acalora,
¡de tí no se hizo al hombre,
sino de otro barro informe!

Botija, aríbalo,
vientre que fermenta
en parto febril la chicha;
hierves, bailas...
Murmullo recostado
entre el fogón y el batán,
entre la mesa y la sed.
Vacía, triste, acongojada,
te desescama el áspero tiempo
y postrada inútil te quiebras,
¡de tí no se hizo al hombre,
sino de otro barro informe!

Olla, cántaro,
recipiente fértil, florido,
en manjares prodigioso,
huellas de un arte lítico,
pedrada del profundo orgullo
cuando eres cántaro hambre,
¡de tí no se hizo al hombre,
sino de otro barro informe!


PINTURA RUPESTRE

Torpe salto a la escala divina,
sobre lienzo recio, megalítico,
eres espectro del alma primitiva,
remiendo cromático de algún sueño,
estampido discreto de amor sideral.
     ¡Estela salvaje del hombre,
     de las manos de un puro hombre!
Secreto guiño de la luna enferma,
deslumbró pinceles y al vago canto;
luego al rancio trazo de la sien altiva
dio historia, o lúdico calendario,
en días parcos, umbríos, sin vendaval.
     ¡Estela salvaje del hombre,
     de las manos de un puro hombre!
Con remos de un dios cansado, perdido,
estigmas indelebles se rubricaron,
y bermejos mensajes de un pudor ido
junto al cielo, al fuego, se anidaron
en la tez virgen de tierras luminosas.
     ¡Estela salvaje del hombre,
     de las manos de un puro hombre!
Presagio brumoso de una profecía
en alturas gentiles del espíritu,
acertijo, enigma crucificado,
jeroglífico irremediable del ser
serás sempiterna bucólica pintura.
     ¡Estela salvaje del hombre,
     de las manos de un puro hombre!

(Del poemario: “Morada sin tiempo”)